Todos conocemos qué es el aceite de oliva. Pero lo que quizá no sabemos es que los diversos tipos de aceite de oliva se diferencian en función de la materia prima utilizada y de su grado de procesamiento, dos cuestiones que influyen directamente en su composición nutricional y en los beneficios del aceite de oliva para la salud humana.
Y es que las propiedades del aceite de oliva son las mismas en todas sus variantes, pero se manifiestan de forma más acusada cuanto mayor es la calidad y la pureza del aceite. Aclaremos que los diferentes tipos de aceite de oliva, enumerados de menor a mayor calidad, son los que siguen:
De ellos, el aceite de orujo de oliva presenta la particularidad de que se elabora con los restos de aceituna provenientes de la elaboración de las demás clases de aceite.
Y, por contrario, el aceite de oliva virgen extra (AOVE) procede de variedades de aceituna de la máxima calidad y es la que sufre menor grado de procesamiento: se extrae en frío mediante métodos naturales y sin calentamientos ni sustancias químicas, lo que garantiza una gran pureza y la obtención de las mejores cualidades organolépticas, como el sabor, el aroma, la textura y el color.
Además de su bouquet y aroma únicos, el aceite de oliva virgen extra (AOVE) es más rico que las otras variedades de aceite en sustancias nutricionales beneficiosas para la salud. Su uso habitual en guisos, aderezos y ensaladas es vivamente recomendado por médicos y nutricionistas.
Conozcamos las propiedades del AOVE y cómo estas influyen positivamente en nuestra salud:
El Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE) es muy rico en grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas. Asimismo, el contenido en vitaminas del aceite de oliva es alto, y muy especialmente en lo que se refiere a las vitaminas E y K.
Además, es una importante fuente de antioxidantes, sustancias que combaten la inflamación, previenen ciertas enfermedades y retrasan el proceso natural de envejecimiento.
La inflamación crónica influye negativamente en la aparición de ciertas cardiopatías, algunos cánceres, la diabetes de tipo 2 y la artritis.
Los principales efectos antiinflamatorios del AOVE parecen derivarse de su alto contenido en antioxidantes y también de la alta proporción de ácido oleico que contiene. De hecho, existe un amplio abanico de estudios médicos que confirman que el consumo regular de aceite de oliva está relacionado con la reducción de los marcadores de inflamación.
Sin embargo, hemos de tener en cuenta que muchos procesos de inflamación crónica son de bajo nivel y pasan desapercibidos durante años hasta que causan daños orgánicos significativos.
De ahí la importancia de consumir regularmente Aceite de Oliva Virgen Extra, al objeto de retrasar el deterioro inflamatorio: la inclusión de AOVE en la dieta ayudar a proteger el organismo de los daños a largo plazo provocados por la inflamación, previniendo las dolencias anteriormente reseñadas.
Los beneficios del AOVE en lo que se refiere a la prevención de enfermedades cardiovasculares están fuera de cualquier duda. No olvidemos que ese tipo de trastornos, como cardiopatías y accidentes cerebrovasculares, son la principal causa de muerte en el mundo.
Y no hablamos por hablar: los estudios por zonas geográficas siempre han revelado que la mortalidad por estas enfermedades es más baja en ciertas zonas del mundo, y muy concretamente en los países mediterráneos, donde el aceite de oliva es una parte habitual de la dieta diaria.
Esta observación despertó en su día el interés de médicos y científicos por la denominada dieta mediterránea, por lo que comenzaron a realizarse ensayos individuales con los diferentes alimentos que integran ese tipo de dieta.
En la actualidad, todos los estudios y ensayos realizados con el aceite de oliva coinciden en que su consumo regular está asociado a una menor prevalencia de las enfermedades cardiovasculares.
Resumamos los principales efectos beneficiosos para la salud del consumo regular de AOVE:
Y un dato que no debemos olvidar: estas propiedades y beneficios están presentes, en mayor o menor medida, en todos los aceites de oliva, pero es el Aceite de Oliva Virgen Extra el que se lleva la palma: su proceso de extracción, sin calentamientos, productos químicos ni aditivos, garantiza la pureza de su composición y, por tanto, de todas sus propiedades saludables.
Suscríbete a nuestro newsletter para recibir las nuestras novedades.
© 2023 Aceites Casablanca, todos los derechos reservados